Odisea de un cubano para enterrar a su abuelo fallecido por coronavirus en Villa Clara

Mientras la prensa oficialista cubana intenta transmitir el mensaje de tener controlada la situación, las redes sociales evidencian la desesperación de las familias cubanas que intentan dar una digna sepultura a sus muertos.

• Redacción de CiberCuba.  | 23/08/2021 –

La angustia de los cubanos crece con el paso de los días, a medida que la propagación del coronavirus colapsa las instalaciones hospitalarias y el aumento de los fallecidos desborda las capacidades de morgues, funerarias y cementerios del país.

Identificado en la red social como José Alberto, el cubano relató la odisea que significó para su familia el entierro de su abuelo, víctima del coronavirus en la provincia de Villa Clara, una de las más afectadas por la incidencia del virus y el colapso de sus hospitales y servicios funerarios. “Muchas gracias a todos por sus mensajes. Ya mi abuelo descansa en paz. Aquí les cuento la Odisea que pasamos ayer para enterrarlo. A mi abuelo hubo que enterrarlo en otro municipio, Manicaragüa, que queda a unas 20 millas de Santa Clara, lugar de donde somos”, dijo José Alberto en un hilo de Twitter.

Según explicó, al encontrarse colapsado el cementerio de Santa Clara y en obras de ampliación, la familia tuvo que hacer gestiones para realizar su enterramiento en el municipio de Manicaragua. “Mi familia no pudo velarlo porque la funeraria también está colapsada y no lo aceptó”.

“Luego llamamos al carro fúnebre para trasladarlo hacia Manicaragua y nos dijeron que no podían llevarlo porque no tenían sarcófagos disponibles”, dijo José Alberto, desgranando el rosario de adversidades que tuvo que afrontar su familia para dar sepultura al abuelo fallecido por la COVID-19.

Como muchos cubanos, la familia de este joven tuvo que recurrir al mercado negro para “resolver” un ataúd para dar una digna sepultura al anciano. “Pudimos resolver $$$$ uno y por nuestros propios medios llevar el cadáver hasta ese municipio a las 2 am”, confesó este cubano que, al menos, contaba con los recursos necesarios para comprar un sarcófago pagando un sobreprecio. Una vez en Manicaragua, los sepultureros del cementerio municipal quisieron enterrarlo “junto con 2 cadáveres más; pero nos negamos”.

“Ni los muertos en Cuba descansan en paz. Uno nunca piensa que va a pasar por todo esto, hasta que te toca. Hemos tocado fondo como país, como sociedad. Cuiden a los suyos porque lo que me pasó a mí les puede pasar a Uds. también. Gracias a todos. Bendiciones”, concluyó José Alberto, un cubano más que ha utilizado las redes sociales para describir la lacerante realidad de Cuba, donde la gestión de la pandemia pone en cuestión la capacidad de previsión y actuación de las autoridades.

Este lunes, el Ministerio de Salud Pública (MINSAP) reportó 74 fallecidos  y 9,320 nuevos contagios de coronavirus en Cuba. Con esta cifra, el país ronda casi los 50 mil casos activos de COVID-19.

La situación en Villa Clara obligó al gobierno a ordenar la puesta en marcha de hospitales de campaña y la formación de un “contingente interprovincial de trabajadores de la salud” para dar respuesta a la crisis sanitaria por el coronavirus que enfrenta el territorio.

Convertir escuelas y policlínicos en hospitales de campaña ha sido la medida ideada por las autoridades para brindar atención sanitaria al creciente número de contagiados en Cuba, muchos de los cuales son menores de edad.

A su vez: Entierran fallecidos por coronavirus en Pinar del Río a un lado del cementerio

• Maykel González. | 23/08/2021

Enterramientos en área aledaña al cementerio de Pinar del RíoFoto © Facebook / Ronald Suárez

La capacidad de los cementerios se ha visto excedida en varias provincias de Cuba ante el alza de muertes por la pandemia de coronavirus, como sucede en Pinar del Río, al tiempo que el gobierno y los medios oficialistas niegan la existencia de fosas comunes en el país.

El periodista cubano Ronald Suárez compartió imágenes de las sepulturas en una senda de tierra a un costado del cementerio de Pinar del Río, donde se cavan los hoyos alrededor del muro de la instalación. En las fotos, se ven cruces de madera y ofrendas florales.

“Antes de que el Dr. Durán diera el parte de hoy, ya sabía que las noticias para Pinar del Río no serían buenas, por las veces que desde mi balcón vimos pasar el carro fúnebre camino al hospital León Cuervo Rubio”, dijo Suárez en Facebook, y añadió que, en la última jornada, el territorio registró siete fallecidos, además de siete pacientes en estado crítico y ocho graves, incluyendo dos gestantes de menos de 30 años.

“Un día atrás, teníamos cinco críticos menos y la misma cantidad de graves. O sea, que hay gente que transitó hacia la muerte en cuestión de horas, sin aparecer nunca (en) los partes. La enfermedad no dio tiempo”, señaló.

“Según las cifras del MINSAP (Ministerio de Salud Pública), cinco de cada 100 pinareños ha contraído la enfermedad desde el inicio de la epidemia. 14,275 lo han hecho los últimos 15 días. Una barbaridad para un territorio con apenas 580 mil habitantes”, aseguró.

Suárez recalcó que las cifras podían ser “frías” y “vagas” a la hora de referirse a la situación real. “Sin embargo, para que no nos falle la memoria, como expresión tenebrosa de lo que nos viene costando este virus maldito, en el costado derecho del cementerio, hay una hilera de cruces que se alarga por día y nadie sabe hasta dónde llegará”, concluyó.

Trabajos de ampliación de cementerios se han reportado desde varias localidades del país. Obras de ese tipo se han llevado a cabo, por ejemplo, en los camposantos de Santa Clara y Ciego de Ávila.

La televisión estatal reveló que en Cienfuegos se enterraban hasta 50 personas diarias en medio de la peor ola de contagios y muertes por coronavirus desde que iniciara la pandemia en marzo de 2020. Sin embargo, no precisó que los decesos correspondieran a la enfermedad.