De acuerdo con el fiscal Héctor Barros, la data de la muerte del venezolano corresponde a entre 7 y 10 días. El exmilitar estaba refugiado en Chile

En la foto: Policías e investigadores forenses trabajan en el área donde fue hallado el cadáver del ex militar venezolano Roland Ojeda, el 1 de marzo de 2024, en Santiago, Chile. 

AP /Esteban Félix

Por Sofía Nederr 2 de marzo de 2024 –

SANTIAGO — Héctor Barros, fiscal de Chile, confirmó la noche de este viernes 1 de marzo sobre el hallazgo del cadáver del exteniente venezolano Ronald Ojeda Moreno, secuestrado de su residencia el pasado 21 de febrero.

Barros añadió que la data de muerte corresponde a entre 7 y 10 días. Desde la tarde de este viernes, los equipos de la Policía de Investigaciones (PDI) y Equipo de Crimen Organizado y Homicidios (ECOH) de la Fiscalía, se trasladaron hasta zona de Maipú, en la provincia de Santiago, Región Metropolitana, donde hicieron investigaciones con maquinaria pesada.

“Se han realizado las pericias al cuerpo que fue encontrado y finalmente podemos, en base a las pruebas, confirmar que corresponde a Ronald Ojeda, la víctima de secuestro. La data de muerte aproximada, de acuerdo al médico, detalla que es de unos siete o seis días, por lo que coincide con el secuestro”, señaló el fiscal Héctor Barros.

La fiscalía también confirmó el viernes la detención de una persona por los hechos, un venezolano de 17 años que se encuentra en Chile en situación irregular, y la existencia de otras órdenes de detención pendientes de ejecutar respecto a participantes en los hechos, según la investigación.

El gobierno chileno atendió el caso con “gran urgencia” por la forma profesional en que se llevó a cabo el secuestro el 21 de febrero en la madrugada, supuestamente ejecutado por venezolanos ataviados con uniformes de la policía de investigaciones, en un operativo que fue impecablemente grabado por las cámaras de seguridad y sobre el que pesaba una investigación secreta.

De acuerdo con información de La Tercera, la identificación del exteniente Ronald Ojeda Moreno se logró mediante huellas dactilares y por la ropa interior que presentaba el cuerpo, la misma que llevaba el día del secuestro.

El exmilitar fue extraído de su residencia, semidesnudo y escoltado por hombres con el rostro cubierto, en un edificio de Santiago, donde viven varios venezolanos. Hasta ahora no está claro quién se lo llevó y surgieron muchas hipótesis, entre ellas la del excomisario venezolano Iván Simonovis, quien denunció que habría sido secuestrado por agentes de la Dirección de Contrainteligencia Militar (DGCIM) del régimen de Nicolás Maduro.

El exteniente Ronald Ojeda Moreno fue detenido en abril de 2017 tras ser vinculado en la llamada operación “Espada de Dios”, una rebelión de militares que pretendía asaltar varios cuarteles de Venezuela. 249 días después Ojeda se fugó junto a otros detenidos del Centro Nacional de Procesados Militares. En enero de este año, el fiscal general designado por la extinta Asamblea Constituyente de Maduro, Tarek William Saab, vinculó a Ojeda en la presunta conspiración conocida como “Brazalete Blanco”.

El 23 de enero, fue degradado y expulsado de la Fuerza Armada venezolana junto a otros 32 militares señalados de presunta “traición”.

Esta es una investigación compleja, vinculada al crimen organizado”, afirmó Barros.

Luego del secuestro, la prensa chilena insinuó que se trataría de un exmilitar acogido en Chile como refugiado, un dato que no fue confirmado ni desmentido por el gobierno por la naturaleza delicada de este estatus migratorio.

El caso causó gran conmoción en un país poco acostumbrado a delitos como los secuestros, e incluso generó solicitud de protección por parte de otros venezolanos refugiados, según confirmó el gobierno en días posteriores a la desaparición de Ojeda.

Una de las hipótesis que se barajaban era que Ojeda —por el que nunca se exigió el pago de un rescate a su familia— hubiera sido llevado de regreso a Venezuela.

@snederr

FUENTE: Fiscalía General de Chile / La Tercera

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