Homenaje a las víctimas del remolcador 13 de marzo, en las afueras de la Ermita de la Caridad, Miami. (EFE)

Organizaciones del exilio cubano en Miami honraron el miércoles a las 37 víctimas del hundimiento del remolcador 13 de marzo, ocurrido el 13 de julio de 1994 cerca de la bahía de La Habana, reportó EFE.

Uno de los homenajes se realizó en la Ermita de la Caridad, donde además de una misa, la organización del exilio cubano Movimiento Democracia llevó a cabo en el malecón de esta iglesia un evento simbólico para recordar a las víctimas, entre las que figuraron 10 niños.

El director de este movimiento, Ramón Saúl Sánchez, señaló que el peligro de que se sigan hundiendo embarcaciones en la Isla no solo está latente sino que crece en la medida en que más cubanos la abandonan.

“El día anterior de que los Gobiernos de Estados Unidos y Cuba anunciaran la nueva relación entre ambos países, el Gobierno de Cuba hundió un barco y mató a una persona exactamente en las mismas circunstancias que la que hundió el remolcador del 13 de marzo”, señaló a EFE Sánchez.

Uno de los presentes en el tributo del miércoles fue el exiliado Jorge García, quien perdió a 14 familiares en el incidente.

“El régimen cubano sigue diciendo que aquello fue un accidente, qué gran mentira de un régimen que no quiere a su pueblo, realmente fue un hecho criminal que no tiene paralelo en nuestra historia reciente”, declaró a la agencia española García, autor de un libro sobre el hecho.

En el acto, durante el atardecer, fueron colocadas las fotos de los muertos en cruces individuales y acompañadas de flores, a lo largo de la orilla del mar.

“Hoy marcamos 22 años desde la horrible masacre que se produjo cuando matones del régimen de Castro brutal y deliberadamente atacaron un remolcador con hombres, mujeres y niños a bordo, que simplemente estaban tratando de escapar de la tiranía”, señaló horas antes el congresista cubanoamericano Mario Díaz-Balart.

El congresista lamentó que un número “récord” de cubanos “está arriesgando todo para emprender el mismo viaje peligroso a través del Estrecho de Florida para escapar de su prisión de la isla”.

Más de 35.000 emigrantes cubanos han llegado a Estados Unidos en los primeros siete meses del presente año fiscal, que comenzó en octubre pasado, cifra que se acerca ya a los más de 43.000 que llegaron durante todo el año fiscal anterior.

El 13 de julio de 1994 el remolcador “13 de marzo”, de propiedad estatal, fue sustraído por decenas de personas que querían huir de Cuba y luego fue embestido y hundido por cuatro barcos del Gobierno cubano, en la bahía de La Habana, según testimonios de los sobrevivientes.

Gabriel Prieto Suárez fue una de las personas que sobrevivió al suceso y durante el homenaje hecho en Miami recordó que ese día tuvo que mantenerse 45 minutos en el agua hasta que fue rescatado.

“Muchos cadáveres chocaban conmigo mientras estaba flotando en el agua (…) Creía que estaba en un sueño”, declaró el miércoles a EFE.

En Cuba, activistas de derechos humanos realizaron una serie de actos de conmemoración en el malecón de La Habana y otros puntos del territorio.

Como cada año, los activistas lanzaron flores al mar desde el malecón como tributo a las víctimas mortales del remolcador.

La diáspora cubana siempre ha calificado de “masacre” el ataque de los barcos cubanos al remolcador, mientras que las autoridades de la Isla han sostenido que se trató de un accidente.