Via Alfredo Ruiz – Facebook comment

“La Cabaña” 20 de Agosto del 1963 Año de sangre y luto para el presidio politico Cubano.

Gorrión, la tierra y el cielo
te dan aurora y frutas
y tus alas disminutas
llenan mi blanco pañuelo.
Con la magia de tu vuelo
puedes entrar y salir
mientras yo no logro huir
entre tanta gente extraña
de esta maldita “Cabaña”
donde me han puesto a morir.
Cuando sobre los oscuros
techos del presidio vuelas
para ti los centinelas
no son asperos ni duros.
Por encima de los muros
cruzas moviendo las alas
y a mí, si busco a las malas
huir de este pardo estrecho
resonarán en el pecho
un ramillete de balas.
Gorrión, fue tu rey de España
quien alzó muros y rejas
por él existen las viejas
prisiones de la “Cabaña”.
En tenebrosa campaña
los soldados de tu rey,
usando la misma ley
que hoy sangra a la patria mía
quemaron la rebeldía
del bravo cacique hatuey.
No temas, gorrión pequeño
trampas en esta agonía
cuando hoy que está vacía
la jaula azul de mi sueño.
Ya no tengo más empeño
que acorralar mi fastidio
y si las alas te envidio
es porque puedo con ellas
volar hacia las estrellas
olvidando este presidio.
Tú puedes volver al nido
donde está la compañera
que enamorada te espera
cuidando al pichón dormido.
Esa dicha yo he perdido
por mantener ideales
y en estos antros fazales
vivo muriendo, gorrión,
ahora que mis hijos son
huérfanos provisionales.
Tú vistes con el plumaje
que te dió naturaleza
y a mí en esta “fortaleza”
me han puesto un misero traje.
Por cuenta de un personaje
que al pueblo cubano explota
sobre mi camisa rota
se pinta una P de preso
pero aquí yo soy más que eso:
Puro, Poeta y Patriota.
Soy patriota y anti-ruso
que soporta entre amarguras
las infinitas torturas
que el sistema pone en uso.
Es verdad lo de este abuso
aunque otra cosa te digan;
hay soldados que me obligan
a dormir sin tener sueño
igual que a un niño pequeño
porque sino me castigan.
Por no apenarte avecilla
de las pupilas te borro.
La oscuridad del “Chinchorro”
y el frío de la “capilla”.
Ayer la ropa amarilla
fue símbolo represivo,
y hoy el traje verde-olivo
que Gloria ganó en la “Sierra”
hunde al pueblo de mi tierra
en un terror colectivo.
Nunca desiendas, gorrión
hastas los fosos del crimen,
que allí de ver muerte gimen
las piedras del “paredon”.
Escapa de este rincón
salpicado de heroismo
que en la pared de este abismo
salta la sangre inocente
de un pueblo grande y valiente
que no quiere comunismo.
Cuando se te nuble el cielo
de aguiluchos de aluminio
y la hora del exterminio
suene para el tiranuelo
no me le prestes el vuelo
al verdugo que ametralla
a un pueblo que sufre y calla
y por sus mártires llora
hasta que llegue la hora
de ajusticiar al canalla.
Gorrión, en esta galera
donde vivo prisionero
estoy triste y no me entero
de lo que ocurre allá afuera.
Cuidame bien la bandera;
no permitas que el caudillo
que engañó a un pueblo sencillo
nuestro pabellón recoja
para alzar la tela roja
de la hoz y el martillo.
Y el fin, ahnelo, gorrión
que cuando al aire te eleves
entre las alas lleves
mi triste lamentación.
Escapa de esta prisión
donde todo es tan sombrío
y llevale al pueblo mío
mis palabra valerosa
y a mis hijos y a mi esposa
el beso que les envío.
Osvaldo Cámara…