LA HABANA, Cuba.- A pocas horas de la llegada de Barack Obama, presidente de Estados Unidos, a Cuba, agentes de la Seguridad del Estado han amenazado a miembros del movimiento opositor Somos +, exigiéndoles que no salgan de sus vecindarios mientras dure la visita del mandatario del norte.

Joanna Columbie Grave de Peralta, directora de la academia 10/10 y miembro del consejo directivo de Somos +, se encontraba en La Habana el día 10 de marzo cuando recibió una llamada donde un oficial le comunicaba que se debía presentar en la estación de la Policía Nacional Revolucionaria PNR del municipio Céspedes en la provincia de Camagüey, lugar donde reside.

La joven opositora que se encontraba organizando diferentes actividades concernientes a su grupo político y a la vez tramitaba una visa a Perú como invitada a participar de la experiencia electoral que vive el sureño país por estos días, decidió asistir al llamado policial para luego continuar sus labores en la ciudad capital.

“El oficial de la Seguridad del Estado me dijo que no puedo regresar la Habana y que tengo prohibido salir de mi municipio… de hacerlo sería detenida… además traería implicaciones en mi futuro viaje a Perú”, comentó Joanna.

Desde el día 17 de marzo que Columbie arribó a su casa y hasta la fecha, funciona en los alrededores de su morada un puesto de mando que la vigila las 24 horas del día. “Esta vigilancia es reforzada de manera particular en las noches con la presencia de ‘voluntarios’ de avanzada edad”, aseguró.

Unos kilómetros más cerca de La Habana, en la occidental provincia de Matanzas, Franky Rojas, enfermero de profesión y miembro también del movimiento político Somos +, recibió en su hogar en la noche de ayer 18 de marzo a dos oficiales que querían ‘conversar’.

“Me advirtieron bien claro y con todas las palabras que no intentara ir a La Habana porque sencillamente no me lo permitirían y que así sería con todos y cada uno de los miembros del movimiento en todo el país”, explicó Rojas en un comunicado publicado en su página en Facebook.

“Me han puesto un arete, como dijera un amigo en referencia a este tipo de personas cuya tarea es seguir todos nuestros pasos”, comentó el joven matancero cuando se percató que a él también le habían puesto vigilancia.

Otros miembros de este movimiento en los últimos días también han sido visitados por las autoridades cubanas para evitar cualquier tipo de movimiento hacia La Habana mientras Barack Obama se encuentre en Cuba.