Santovenia fue excarcelado el 07 de octubre, 2018, estaba preso desde el 29 de diciembre, 1991 cuando procedente del exilio desembarcó en la Isla cerca de Cárdenas con el plan de crear un frente de oposición frontal al régimen en unión de Pedro Álvarez Pedroso, excarcelado en enero del 2017 y Eduardo Díaz Betancourt, fusilado el 01 de enero, 1992.

Santovenia en el momento de su salida de prisión después de cumplir 27 años y siete meses, era el preso político cubano con más tiempo en prisión después del Presidio Histórico que culminó con la excarcelación de Mario Chanes de Armas el 16 de Julio de 1991, después de cumplir 30 años.

Según sus palabras al ser excarcelado: “Estuve 22 años en celdas de 24 hombres y los otros cinco, los pasé en un campamento de mínima seguridad”. “vine a Cuba a luchar por la libertad de mi país, para darle una Patria libre a mis hijos y que aquí se pudiera vivir con felicidad, con protección de los derechos humanos”.

Santovenia Fernández como Álvarez Pedroso fueron sentenciados a muerte, pero el Consejo de Estado finalmente determinó para ellos 30 años de cárcel.

Su padre Daniel Santovenia Rodríguez, Brigadista #3816 fue herido en combate y regresado con un grupo de enfermos y heridos a EE.UU. el 14 de abril, 1962.

Daniel Santovenia Fernández residía en Matanzas en precarias condiciones de vida; en una ocasión fue arrollado por un carretón a consecuencia de estar limitado en su capacidad auditiva. Él y otros que han cumplido largas condenas políticas en Cuba a pesar de tener sus familiares en EE.UU. no les dan visas para emigrar con el argumento del Departamento de Emigración de que sus RESIDENCIAS han expirado. Serias gestiones encabezadas por Ángel De Fana, Milanés y Fariñas se realizaron ante Senadores, Representantes federales y personalidades internacionales, pero al momento no ha habido resultados.

Como consecuencia de las torturas físicas y psíquicas de las que fue víctima durante sus largos años de prisión, el hambre y la falta de atención médica, contrajo varias enfermedades, entre ellas, una neumonía que le cobró la vida.

Santovenia Fernández murió olvidado en Cuba sin poder regresar a Estados Unidos