Por Jorge Hernández Fonseca. 26 de Febrero,  2021. 

¿Raúl tú quieres saber, de dónde son los cantantes? Son de la Habana y cantan en Miami… Tararea todo cubano, de la isla o el exilio, después de la bombástica producción conjunta entre cantantes exiliados en Miami y cantantes opositores contestatarios de la isla, interpretando una extraordinaria composición a varias manos y a varias voces, expresando musicalmente lo que ya es un himno opositor al deplorable estado de cosas dentro de Cuba, donde los comunistas no encuentra sosiego ni siquiera en la haitianización acelerada en la que han sumido la isla. 

Desde mi punto de vista, poco importa el pasado político de los músicos-héroes. Poco importan sus defectos personales, sus buenos o malos hábitos, su modo de vida, o sus previos compromisos artísticos. Son aspectos que la vida se encargará de cobrarles individualmente, pero nunca como participantes destacados de este proyecto patriótico-musical emancipador. Importa, sí, que son cubanos, incluso importa que son cubanos negros y mulatos, a los que siempre la revolución fracasada les exigía una incondicionalidad por el color de su piel de forma inexplicable, ejemplificado con “lo” de “negrito limpia-bota” que la dictadura dirigiera a uno de ellos. 

Aquellos que los han criticado de buena fe, están en su derecho a equivocarse. El pueblo de Cuba ha recibido este “refresco político” como el torpedo más efectivo bajo la línea de flotación de la dictadura, que la misma haya recibido en muchos años, justo cuando se hace presente el agotamiento de una revolución fracasada que prometió ser democrática y devino en la dictadura más cruel y longeva que Nación de Nuestra América haya sufrido nunca en toda su historia. 

Se sabe que el sector artístico sufre de los males asociados a un ego endémico. Gracias por haberse juntado tres grupos artísticos de reconocimiento internacional cada uno, bien diferentes y con carreras afirmadas. Gracias por también haber dado cabida a cantantes desconocidos para el gran público, agregando dos músicos que inician carrera dentro de Cuba y que por ello cuentan con todos los escollos que el castrismo coloca a todo cubano no comunista. Eso dice mucho de esta producción, de los artistas participantes como personas y cierra con broches de oro un producto musical que desde ya será valorado no solamente por sus méritos musicales (muy positivos) como por el aporte patriótico, de unidad y de desprecio nacional a un régimen que no tiene nada más que decir a un país destruido política, física, económica y moralmente. 

Después de esta canción-torpedo, ya nunca más la dictadura será la misma. Como en la fábula cuento, “El rey está desnudo” y desnudado por su propio pueblo “de a pie” como corresponde a una traición política como los hermanos Castro han materializado contra su pueblo.

“Patria y Vida” significa mucho más que el desprecio del decrépito “patria o muerte” de los comunistas golpistas que respondieron a Moscú en la década de los sesenta del Siglo pasado. “Patria y Vida” significa el renacer de la Cuba que todos los cubanos deseamos: sin odios, sin muertes, con oportunidades para todos y sin dueños de mentira que nos enyuguen nuevamente.