“Le instó a que considere establecer una unidad especial o equipo de trabajo para consolidar apropiadamente las investigaciones y procesamientos judiciales abiertos contra la familia criminal de Maduro”, manifestó el senador al fiscal general.

La idea es crear una unidad basada en Miami “que pueda coordinar más eficientemente las pruebas y la información de inteligencia obtenida”, así como la colaboración de los aliados de Estados Unidos en la región”, explicó Rubio.

Rubio instó al fiscal a trabajar estrechamente con los investigadores en el Distrito Sur de Florida, quienes tienen amplia experiencia en las pesquisas sobre las operaciones del crimen transnacional.

En su misiva, que su oficina compartió con el Nuevo Herald, el senador también resaltó que Maduro está rodeados por criminales que le respaldan para proteger de esa manera sus propios intereses.

Estos personajes continúan —frecuentemente con la ayuda de los gobiernos de Cuba, Rusia, China, Turquía e Irán— participando en fructíferos emprendimientos criminales transnacionales que generarán dinero y poder” para beneficios de ellos y de Maduro.

“Para estar claros, el régimen de Maduro amenaza los intereses de la gente más allá de las fronteras de Venezuela, incluyendo a las de nuestros aliados en la región, y es una amenaza para la democracia, la estabilidad regional, y en consecuencia, contra nuestra propia seguridad nacional”, dijo Rubio.

El senador Marco Rubio (centro), republicano por Florida, habla con el senador Ron Johnson (izquierda), republicano por Wisconsin, mientras el senador Bob Menéndez (derecha), demócrata por Nueva Jersey, habla en una reunión de una subcomisión de la Comisión de Relaciones Exteriores del Senado. Foto archivo. J. SCOTT APPLEWHITE AP